sábado, 24 de marzo de 2018

IF

Hace poco más de una semana sucedió algo que de verdad no puedo decir, no sólo por una promesa que hice sino porque en el momento en que salga de mi boca o salga de mí la información de cualquier otra forma sé que me voy a romper, a romper emocionalmente y claro está, a romperme a llorar. 
Siempre me había preguntado si yo estuviera en esa situación ¿qué haría? Pues bueno, ahora, desde hace una semana, esa pregunta ya no entre dentro del if porque ahora sé qué hice cuando pasó. Y pues, hice exactamente lo que pensé que haría y sucedió exactamente lo que pensé que sucedería, este sentimiento confuso de saber que tomaste la decisión correcta pero que la verdad no fue una decisión correcta porque para estas situaciones no hay una respuesta correcta, sólo una decisión que en primer lugar no debiste de haber tomado, que debiste evitar que pasara para seguir dejando esa pregunta en un caso hipotético.
Han habido muchos cambios esta semana, por si no fue suficiente, y justo cuando más te necesitaba has decidido hacer algo que, si bien sé que eventualmente tenías que hacer, lo hiciste en el peor de los momentos, porque ahora, cada que me acuerdo de lo que hice quiero llorar y quiero correr a abrazarte pero, ya no va a ser posible, porque decidiste hacer lo que tuviste meses para hacer en este preciso momento. Y justo hoy que estuve pasando por complicaciones por mis acciones, bueno, más bien POR NUESTRAS ACCIONES, decides que es preferible ignorar mis mensajes aún cuando te estoy contando algo grave y mientras escribo esto mis malditos ojos se llenan de lágrimas y mi corazón siente un gran vacío.
Esto no debió ser así. En este blog las mayorías de mis entradas las escribí por lo que alguien me hizo pasar, y se supone que contigo todo estaba siendo diferente, de verdad; con él me sentía menos sola porque aunque éramos miserables al menos lo éramos juntos y pensaba que tenía alguien con quien contar, cosa que no es así, pero contigo, tras tantos años de amistad, tras tantos años queriéndote y guardándomelo, con este año juntos en los que el 95% por ciento del tiempo te juro habría podido llorar de felicidad, sabía que estaba en casa, sentía felicidad estando contigo y que el mundo alrededor no solo no importaba sino que lo ignoraba porque tú eras mi nuevo mundo, y no era que quisiera estar contigo para sentirme menos sola o querida, sino que contigo podía ser yo y podía aprender a estar menos sola y sentirme querida pero yo también haciéndolo. Ahora tras esta perorata recién narrada solo me queda decir que hoy, solo hoy te detesto por lo que me hiciste pasar y porque, si siempre has estado ahí para mí, en este momento que probablemente sea uno de lo más difíciles que he pasado por mi vida y sin exagerar, ¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿por qué no has estado conmigo????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????? La única vez que esto había pasado es porque estabas de viaje en otro continente pero ahora, ¿cuál es la excusa o motivo? y en este momento literalmente eres la única persona con la que puedo contar y hablar de esto porque nos prometimos quedaría entre nosotros. Te necesitaba y te voy a necesitar ...¿vas a estar ahí o ya puedo ir hundiéndome otra vez?

No hay comentarios:

Publicar un comentario