sábado, 31 de agosto de 2013

Para ti, pero más para mí.

Sintiéndote como un juego, te imagino , acariciándome a lo lejos con tu mirada; abres y cierras tus ojos coqueteándome.
El silencio arrulla mis pensamientos desaforados, inefables y totalmente febriles.
Te mueves con premura, me escondo con sigilo.
Actuamos, bailamos sin querer y caemos en el profundo abismo de una historia anodina.
Nos congratulamos por no haber perdido nuestra altivez natural en una representación absurda de dos viejos amantes tratando de conocerse y reconocerse; después de tanto, después de todo.
Avanzamos, nos largamos del mundo, caminamos al umbral en direcciones opuestas.
Me voy más ligera, sin voz, ni sombra, ni amor, ni recuerdos, ni Dios a quien llorarle.
Caigo.
Respiro.
Regreso al momento pero, ya no existe, se acabaron los cortejos.
Mi cuerpo vuelve a sentirse mío y, entiendo cómo, por qué y a dónde se fue el peso y, suspiro y anhelo, un nuevo comienzo.

miércoles, 28 de agosto de 2013

Ventanas


Líquido espeso brota de las ventanas
espeso en frustraciones, dolores y rabietas
de un color obscuro y translúcido 
Las ventanas luchan por cerrarse
porque ya no saben cómo recibir la luz;
cómo recibirla sin que la ciegue 
Se levantan las cortinas por el aire
caen empapadas y sin gracia
adheridas al cristal que no pudo proteger
Pero se siente la carga en el aire
y los olores magnifican la tragedia
que causó las fisuras en ésa casa vieja.
¡Ventana frágiles! No dejan de azotarse.
Tratando de romperse, aprovechan la corriente
¡Ventanas! Umbrales perpetuos.
Absorbieron cuanto pudieron, 
permitiendo la entrada de millones de miradas
Que miraban con extraordinaria avidez el resto de la casa
¿Qué buscaban? Un valioso contenido
¿Lo obtuvieron? *Se escucha un suspiro...*