jueves, 16 de mayo de 2013

Soñé ser un puerco.

El candor que desborda esa menuda voz, nacida en la habitación de un recóndito país no muy lejano, resonaba con fuerza por el aire. La fuerza de su voz debía ser inexplicable; tenue pero estridente. Crearán que eso no puede ser posible, pero hay personas que nacen con el don de ser escuchadas, de transmitirse en palabras con tanta quietud, pero con tanta certeza que es imposible no escucharlas. Éste era uno de estos casos, un ser que desconocía los matices obscuros de la vida, pero capaz de transportarte a unos inimaginables; era combustible para estás maquinas sedientas de una directriz . Con él, hallaban eso. Querían ser parte de su mundo, ésas mansas y poco confiables criaturas bebían de él, inútiles ya.
A él lo vamos a llamar Arturo.
Arturo estaba tan absorto en si, que no notaba cuán valiosas eran sus ideas. Con esto no me refiero a que sean buenas, pero era lo que ellos necesitaban escuchar, un pensamiento unificador; podían sentirse uno.
Y sin querer el se desvanecía, absorbían su ser como puercos hambrientos. Puercos hambrientos debían de ser, lo anhelaban, le necesitaban. Él sólo fue lo que fue. Alguien excepcional que nunca lo supo, que nunca comprendió lo que tenía, ni el porqué se consumía....

lunes, 13 de mayo de 2013

¡Si tan sólo pudiera haberlo visto venir!
Si tan sólo hubiera visto cómo sería nuestro fin.
Siempre pensé que sería juntos.
Nunca pensé que sería dejándome en este laberinto.
Frío que cala mi alma, la lacera hasta reducirla a nada. 
Sólo una sombra punzante, que me imposibilita seguir buscando la salida.
Dame el mapa, dama la clave, las palabras mágicas que me permitan salir.
Es de locos seguir viviendo de recuerdos días tras día, 
es de locos haber llegado aquí, a ti.
Yo ya no quiero seguir en ti atrapada. 

Animales en celo.

Los fantasmas están cazándome
buscan a que yo pague
que pague por todo lo que he hecho

Nunca quise lastimarte
Sin embargo lo hice,
a mi voz, mi conciencia

¡Vamos!
la luz se apaga, se apaga tan lento
que no me permite retener las sombras

¿Por qué cambié a la luz de mis ojos?
¡Por un placer finito!
Por un minuto de caricias.

Yo, yo sabía que te haría daño.
Yo sabía que también le importabas.
Y a fin de cuentas, somos sólo animales en celo.

Yo quise estar ahí, yo quise tocar sus labios,
estrecharlo en mis brazos, dejarme llevar.
Lo quería para mí.

Y es que sólo por egoísmo puedo moverme
Sólo contemplo mis intereses
Salvo a ti, a ti te dejé atrás.

Lamento, lamento tanto que haya sido así.
El amor no es siempre de parejas.
Y el placer no siempre es amor.

jueves, 9 de mayo de 2013

L-E-T-R-A-S

Listas, uno hace una lista porque sirve para contabilizar, para llevar un orden; para darse una idea de cosas que se han hecho, se cifras, número o/y nombres.
¿Se han detenido a pensar que eso somos en la vida de otra personas? Somos un número asignado en su lista, depende de la relación que llevemos con esa persona. Podemos estar en su lista de amigos, de recuerdos innombrables; podemos estar en su lista de "victorias".
Temo haber caído en esa lista, ya saben, otra más en su lista, perdiendo en nombre y ganando un número y puede que hasta una calificación junto con una crítica.
Sólo soy eso para ti, un número, una persona con quien sabes puedes contar, pero yo sé que no será reciproco. Quisiera desvanecerme de ti.  Quisiera al menos llegar a ser un conjunto de letras.

miércoles, 8 de mayo de 2013

Nuevos problemas, otros labios y un alma perdida

Nuevos problemas, otros labios y un alma perdida
Desde el momento en que estacioné mi mirada en ti te desee.
Sabiéndote un poco imposible, porque sé que si hay alguien que es incapaz de desarraigarse de esa vida tan cruel, eres tú.
Tienes algo maléfico en tu semblante, y es que, cómo una mirada tan dulce, tan hermosa y tan perdida en una miel gloriosa puede llegar a lastimarme así ?
Me tomaste en tus brazos, después de haberme hecho venir allí, a tu casa, me tomaste diciéndome que me querías en la intimidad, que no pusiera resistencia y prometiéndome tu silencio, que este encuentro no habría de saberse si yo así lo quería y yo, débil, cedí a tus deseos.
No digo que yo lo quisiese, simplemente quería salvarte, salvarte de ti, pero no pude, ya estás muy lejos del retorno. Tan sólo me quedé con otro encuentro de caricias, de dominio masculino y de placer, un infinito placer que sigo sin creérmelo; un placer que corrompe sentidos, convicciones e ideales. Dejémosle en que todo esto, debió ser un sueño. Es simplemente hermoso, pero dentro de él, hay un gran vacío sin llenar. Un deseo sin saciar, amorfo, que anhela algo que cree saber, pero que sigue sin ser materia, sin tomar forma o sentido. Nunca he podido querer a alguien dentro de lo normal.